UNA TENAZ CONTROVERSIA
por Jorge Quiroga
La revista Literal quería asumir una estética que consistiera en un espacio de
reflexión inquietante, se trataba de un ejercicio de lenguaje y la Literatura era el lugar
donde el Lenguaje insistía. El tramado y el trámite de las palabras decían
claro que si lo real era imposible, era cuestión de pensar la práctica de
escribir, pero entendiendo a ese proceder como la necesidad de construir una
escritura, una ficción que se pensara a sí misma.
Las fechas en las que aparece la
revista hablan de su situación (Nº 1: noviembre de 1973, Nº 2/3: mayo de 1975,
Nº 4/5: noviembre de 1977), pero en Literal
mantuvimos una tenaz controversia con la época en la que nos tocó actuar. Literal negó de manera contundente las
lecturas del imaginario de su tiempo. Cuestionó la visión realista/populista de
entender a la Literatura como una noticia que mima lo real.
En Literal la pensamos como el ejercicio de un goce, de un placer
solitario, no demandado, que se niega a verse transformado en misión. Porque la
escritura era el desencadenamiento de la pasión del Lenguaje y por lo tanto del
potencialidad de la palabra que no tiene que ver al con su función
instrumental, sino con las cualidades poéticas polisémicas del lenguaje.
Entre los escritores argentinos se
eligieron a Macedonio Fernández, a Jorge Luis Borges, a Oliverio Girondo, al
polaco Witold Gombrowicz, porque ellos constituían una fuente y tradición del
saber a través de sus textos múltiples, microscópicos y fundamentalmente equívocos.
Macedonio, mediante la ironía y su
escritura, planteaba justamente que la sabiduría era ese evadirse a través del
ensueño del vacío. Ese no saber que se convierte en el reconocimiento de otra
cosa, como si esa reincidencia consistiera siempre en un desvío.
En los 'Documentos Literal' y en la
'flexión Literal' simulábamos descreídamente una Teoría de la Literatura, donde
'flexión literal' era 'ese movimiento que une al sujeto con la cultura, al
cuerpo con el lenguaje, en una conformación metafórica que tiene en lo poético
yen la oscilación su virtud de evocación'.
La interpretación que redistribuye
y redimensiona, la critica feroz acerca de las ilusiones referenciales, le servían
a Literal para ir montando su poética
particular en la que la
Intriga le permitía leer en los enigmas de la sexualidad y el
erotismo, las relaciones con el deseo y el estilo.
Los textos literarios que
registraban las páginas de Literal
eran textos narrativos-poéticos de carácter abismal, decían de la posibilidad
del establecimiento de la
Literatura Otra. Circulaban en un movimiento donde el exceso y
la aparición del inconciente, resonaba en los lugares cambiantes. Fuera del
verosímil de esos años, cuyos sostenedores acusaron a Literal de mistificación, empleando así una ceguera previsible.
Integraban Literal: Número 1: Germán Leopoldo García, Luis Gusman, Osvaldo
Lamborghini y Lorenzo Quinteros. Número 2/3: Germán Leopoldo García, Luis
Gusmán, Osvaldo Lamborghini, Jorge Quiroga. Número 4/5, dirección: Germán
Leopoldo García.
El centro de Literal fue Germán Leopoldo García. Su intervención, dinamismo y
resolución explica la existencia de la revista.
Publicado
inicialmente en el n° 5 de la revista EL OJO MOCHO, primavera de 1994.
Hola, Jorge, soy Jonio González. Hace unos días le dejaste un ejemplar de "El que recuerda" a Alberto Szpunberg, para que me lo diera. Te lo agradezco muchísimo, y el libro me está pareciendo extraordinario. Te dejo mi dirección de mail, porque Alejandro García Schnetzer quisiera comunicarse contigo. Espero que no te moleste que use este medio para dirigirme a vos, pero no tengo otro. Un abrazo.
ResponderEliminarjoniogonzalez54@gmail.com
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